Drenaje Linfático Manual
Es una técnica de fisioterapia que consiste en un masaje, suave y lento, que se utiliza para que los líquidos y sustancias que están en el espacio extracelular puedan ser movilizados y eliminados.
El método Godoy
Es una nueva forma de abordar el linfedema. Un método global de Terapia Linfática creado en Brasil por el Doctor José María Pereira Godoy, cirujano vascular y angiólogo, y su mujer, Doctora en Terapia Ocupacional, Fátima Guerreiro Godoy.
el drenaje linfático manual
El Drenaje Linfático Manual es una técnica de fisioterapia que consiste en un masaje, suave y lento, que se utiliza para que los líquidos y sustancias que están en el espacio extracelular puedan ser movilizados y eliminados. El sistema linfático, en condiciones normales, es autónomo e indispensable para el funcionamiento del cuerpo, encargándose de limpiar los desechos del metabolismo. En caso de linfedema, el Sistema Linfático no funciona adecuadamente ni de manera autónoma. Por eso es necesario activar su funcionamiento manualmente, gracias al Drenaje Linfático Manual.
Además de su efecto drenante, la técnica de Drenaje Linfático Manual produce un efecto relajante, cicatrizante y analgésico, ayuda a regular el equilibrio del sistema nervioso, a estimular la movilidad intestinal y a descontracturar.
Después del Drenaje Linfático Manual siempre ha de utilizarse un vendaje, manga o media como prenda de contención o compresión.
Medidas de compresión/contención: vendajes multicapa compresivos, que suelen utilizarse sobre todo durante el tratamiento intensivo y por las noches en fase de mantenimiento de manera opcional.
Existen los manguitos para linfedemas de brazo, por ejemplo. Se emplean cuando aparece un linfedema postmastectomía. Es como una media que simula una segunda piel, se hace a medida y de tejido tricotado plano, no de tejido tricotado circular. También las hay estándar.
Lo mismo para piernas. Al comienzo del tratamiento se usan vendajes y después del intensivo, cuando el paciente ha bajado el volumen adecuado, en la ortopedia se adapta la media de contención de tejido plano a la medida del linfedema. El paciente hace su vida diaria con esa prenda, que es indispensable para no recuperar volumen ni dureza. Si hay edema en dedos de manos o pies se pone un guantelete.
El tratamiento tiene dos partes: intensivo y mantenimiento.
el tratamiento intensivo
El tratamiento intensivo o de choque se compone de sesiones que pueden ser de hasta 8 horas en un día durante 2 ó 3 semanas. Podría repetirse en caso de necesidad dos veces al año, siempre dependiendo del volumen, la fibrosis o la fase evolutiva, hasta lograr la normalización del linfedema.
El paciente tiene que llevar los vendajes o la prenda de compresión establecida durante 23 horas al día mientras dure el intensivo. Se hace además “educación para el linfedema” enseñando técnicas de autovendaje y autodrenaje al paciente.
el tratamiento de mantenimiento
La segunda fase es de mantenimiento. En función de las necesidades de cada paciente se van distanciando las sesiones de tratamiento hasta encontrar el equilibrio del linfedema. Una vez a la semana, cada 15 días, una vez al mes…
En una sesión de 8 horas, o de la duración que el paciente pueda, (siempre se recomiendan 8 horas para piernas y 4 para brazos) se hace al menos una hora de drenaje linfático manual, y el resto del tiempo se dedica a ejercicios respiratorios, ejercicios miolinfocinéticos activos y pasivos.
La linfa se transporta debido a factores intrínsecos y extrínsecos al sistema linfático. La bomba muscular es extrínseca, eso significa que los músculos son el motor que genera cambios de volumen, facilitando el transporte de la linfa en los vasos linfáticos.
Los ejercicios miolinfocinéticos están enfocados a ayudar al movimiento de la linfa gracias a las contracciones musculares. Si el paciente con linfedema, además de hacer los ejercicios miolinfocinéticos lleva la prenda de contención/compresión puesta, se aumenta el bombeo linfático y mejora considerablemente el linfedema.
Hay múltiples ejercicios de brazos y de piernas que ayudan a aumentar el drenaje, pero es muy importante hacerlos lentamente y con prenda de contención/compresión.
cuidados de la piel
La piel de la zona afectada, a medida que el linfedema evoluciona y aumenta su volumen, se torna cada vez más tensa y tirante, pudiendo llegar a romperse y a perder su capacidad defensiva como barrera inmunológica, por lo que hay más facilidad para posibles infecciones.
Además, por la tensión, justificada por el volumen del linfedema, la piel cada vez está más deshidratada, peor nutrida y seca por la reducción de la secreción de las glándulas sebáceas, las cuales, en condiciones normales, mantienen la piel suave y regulan el pH para inhibir el crecimiento de hongos y bacterias.
Existen trucos para mantener la piel en las mejores condiciones. Todos los días hay que limpiar la piel del brazo o de la pierna insistiendo en las zonas con pliegues. Es muy importante secarlo adecuadamente para evitar zonas húmedas y la posible aparición de hongos o heridas. La hidratación posterior es necesaria también para mantener la piel humectada, elástica y revisar que no aparezcan enrojecimientos, manchas, aumentos de temperatura o heridas.
Es necesario tener precaución con:
- Las lesiones de la piel aunque sean pequeñas (rozaduras, cortes…). Si hay sangrado es muy importante desinfectar la herida. Y debemos acudir al médico si aparece sarpullido, manchas rojas, hinchazón, calor, dolor o fiebre.
- La depilación y la máquina de afeitar, las tareas de jardín y de casa, el sol, los insectos, las analíticas o inyecciones y la toma de tensión, la ropa muy ceñida, las uñas, caminar descalzo y las posiciones mantenidas.
la alimentación
En cuanto a la alimentación, hay que tener en cuenta una serie de consejos alimenticios. En general se recomienda una dieta sana y equilibrada. Si es posible y acordando con el médico, se aconseja una dieta con tendencia hacia la alcalinización (básicamente consiste en reducir los alimentos de tipo ácido como las carnes, azúcares, harinas… y aumentar las frutas y hortalizas que son más alcalinas) y beber mucha agua.
En general, se pretende reducir los alimentos ricos en grasas saturadas y los que generen en la digestión proteínas de alto peso molecular (sobre todo las carnes rojas). Se debe a que el linfedema al principio es blando y cede con el reposo, la gravedad y la postura. Conforme evoluciona, cada vez se estancan más proteínas y macromoléculas en el espacio extracelular, de donde el sistema linfático recoge los líquidos y sólidos para formar la linfa y después transportarla, y se va progresivamente endureciendo por aumento de la fibrosis, produciéndose una hipertrofia de la grasa.
el ejercicio físico
También se recomienda practicar ejercicio físico, siempre con la prenda de compresión. Se puede hacer casi de todo, aunque es mejor si es de bajo impacto. Es aconsejable que se practique en el agua, por la ayuda de la presión hidrostática, ya que facilita el drenaje linfático.
La presión que ejerce el agua contra la superficie corporal es como el efecto de las maniobras de Drenaje Linfático Manual, como la contracción muscular o como la prenda de contención. La evidencia científica cada vez refuerza sus beneficios.
el método godoy
El Método Godoy es una nueva forma de abordar el linfedema. Un método global de Terapia Linfática creado en Brasil por el Doctor José María Pereira Godoy, cirujano vascular y angiólogo, y su mujer, Doctora en Terapia Ocupacional, Fátima Guerreiro Godoy. Los doctores Godoy llevan más de 15 años trabajando con pacientes con linfedema en su clínica. La sede central de la Godoy & Godoy International School of Lymphatic Therapy, está en San José do Rio Preto, en Brasil.
El Método Godoy cuenta con publicaciones científicas, libros e investigaciones a nivel internacional. Los doctores imparten cursos de especialización en el área linfovenoso a niveluniversitario por el continente americano y ahora lo presentan en Europa desde la nueva sede autorizada por la Escuela Internacional Godoy & Godoy en Madrid a través de Angela Río, co-directora de Fisioterapia Sanamanzana, y de Paloma Domingo, directora del Centro Vodder de Fisioterapia. Ambas son las fundadoras de la Asociación Española de Linfedema.
en qué consiste el tratamiento
Es un método de Terapia Linfática Global, enfocado principalmente al tratamiento del linfedema y de la patología linfovenosa. Se compone por la conjunción de diferentes técnicas o formas de terapia que pueden utilizarse de forma aislada en función de las dolencias, o de manera combinada.
Las terapias que componen el Método Godoy son:
- Terapia Linfática Cervical
- Terapia Linfática Manual
- Terapia Linfática Mecánica
- Terapias de compresión–contención
- Terapias para la piel
- Educación del paciente para el mantenimiento de los resultados
El Método Godoy presenta varias opciones de tratamiento que se adaptan a cada paciente, combinando para ello varias terapias. Con esta técnica se mejora la circulación linfática a corto y largo plazo.
El tratamiento se realiza en dos fases: intensiva o tratamiento de choque y fase de mantenimiento (igual que la Fisioterapia Descongestiva del Linfedema). Cada paciente es diferente, así como lo es el tiempo de evolución y la existencia o no de fibrosis o endurecimiento del edema.
Un tratamiento intensivo (o terapia de choque) permite una reducción de volumen de aproximadamente un 10% diario y alrededor de un 40-50% en una semana. En los grados I y II es posible una eliminación casi total del edema en un 95% de los pacientes de 1 a 6 semanas. El linfedema es una patología crónica que no se cura, pero que puede pasar desapercibida con el tratamiento adecuado.
El tratamiento es ambulatorio pero en ocasiones el paciente ha de permanecer en la clínica varias horas al día.
un método con base científica
El Método Godoy & Godoy posee evidencia científica. Gran número de artículos científicos publicados, estudios in vitro, in vivo y clínicos avalan su base científica.
Los resultados obtenidos son más rápidos y mantenidos en el tiempo. Durante los últimos 15 años, la Godoy & Godoy International School of Lymphatic Therapy evoluciona cada día gracias a la investigación constante y a la consecuente mejora de sus técnicas, terapias y equipo profesional.
TIPOS DE TERAPIAS DEL MÉTODO GODOY
TLC: Terapia Linfática Cervical o estímulo cervical del Método Godoy
El EC o TLC es una maniobra que se realiza en la fosa supraclavicular, cerca de la base del cuello, próximo a la unión del sistema linfático con el sistema venoso, que estimula además al sistema nervioso. Forma parte del método Godoy&Godoy y puede utilizarse de forma aislada o combinada con otras técnicas de la Terapia Linfática Global.
El estímulo cervical es una técnica especialmente indicada para tratar a niños con linfedema congénito. Puede ser utilizada de forma aislada o combinada con el resto de los tratamientos de la terapia global. El paciente aprecia los resultados en el transcurso de muy pocas sesiones del tratamiento.
Entre sus efectos está la relajación del paciente y el estímulo de la linfa de todo el cuerpo desde dicho punto (confluente yugulo-subclavio). Otra de sus indicaciones principales son los edemas en la cara y cuello, sobre todo postquirúrgicos (después de procesos tumorales y cirugías estéticas, plásticas y reparadoras: rinoplastia, blefaroplastia, otoplastia, maxilofacial, atm…).
TLC: Terapia Linfática Manual o Drenaje Linfático Manual DLM
Es otra de las terapias que forman parte del método global Godoy & Godoy para problemas linfáticos. Se puede utilizar como terapia única o combinada con el resto de técnicas que componen el método Godoy.
Mediante maniobras manuales estimulamos la entrada del líquido linfático (linfa) desde el espacio intersticial hacia los capilares linfáticos y para su posterior transporte a través de los vasos linfáticos, logrando así la evacuación de los líquidos y otras sustancias de desecho.
La Terapia Linfática Mecánica: TLMc o RA Godoy
Se puede utilizar como terapia única o combinada con el resto de técnicas que componen el método Godoy.
Para conseguir que la linfa se mueva por los vasos linfáticos, además del Drenaje Linfático Manual, los doctores Godoy han desarrollado después de años de investigación una serie de dispositivos mecánicos que mediante ejercicios pasivos de los miembros superiores (brazos) e inferiores (piernas), favorecen el movimiento linfático. Se estimulan los vasos linfáticos aumentando el transporte de la linfa y otras sustancias, utilizando los cambios de volumen de los músculos (contracción y estiramiento) como bomba y ayudando a la destrucción de la fibrosis, así como la formación y la evacuación de la linfa de la zona edematizada.
Mediante otros aparatos desarrollados tras los estudios de la Doctora Godoy, los pacientes efectúan ejercicios miolinfocinéticos con movimientos activos que mejoran la contracción de los vasos linfáticos. Es importante educar al paciente para que en su domicilio desarrolle un programa de ejercicios para el Linfedema.
Compresión y contención
Se puede utilizar como terapia única o combinada con el resto de técnicas que componen el método Godoy.
Durante las primeras fases del tratamiento (intensivo) se utilizan prendas de compresión (gorgurao, vendajes…) para ayudar a la reducción del volumen y la fibrosis del edema. Durante la fase intensiva el paciente debe llevar la prensa de compresión todo el día y toda la noche, ajustándola y adaptándola cada vez que sea necesario. Es una parte extremadamente importante de la terapia y requiere compromiso por parte del paciente.
Finalizado el periodo intensivo, el paciente mantiene los resultados del tratamiento con una prenda de contención hecha a medida (media, manga, guante….) de un tejido de baja elasticidad en la mayoría de los casos.
El objetivo del tratamiento es la normalización del linfedema, no solo la reducción. Y por supuesto, el mantenimiento de los resultados.
Terapias para la piel
Todos los días hay que limpiar la piel del brazo o de la pierna insistiendo en las zonas con pliegues. Es muy importante secarlo adecuadamente para evitar zonas húmedas y prevenir la aparición de hongos o heridas. La hidratación posterior es necesaria para mantener la piel humectada y revisar que no haya cambios (enrojecimientos, manchas, aumentos de temperatura, heridas, picaduras…).
Educación del paciente
Es muy importante en el día a día tener en cuenta una serie de recomendaciones.
Llevar a diario la prenda de contención. Hacer ejercicio. Mantenerse en el peso adecuado. Comer sano y equilibrado. Hidratarse por dentro y por fuera. Mover la extremidad afectada. Informarse sobre qué puedo y qué no puedo hacer. Llevar una vida lo más normal y saludable posible. Realizar, con descansos y sin prisa, las actividades domésticas. Asesorarse por un buen fisioterapeuta experto en linfedemas.